lunes, 6 de febrero de 2017

Entrenando a mi caballo

El entrenamiento de un caballo puede ser divertido, pero a la vez puede ser todo un reto. Para un principiante lo mejor es dejar a los caballos jóvenes en manos de los entrenadores más experimentados, pero en realidad, entrenamos a nuestros caballos a medida que interactuamos con ellos, cuando les enseñamos algo nuevo, estamos aprendiendo nosotros también y eso es muy gratificante. Por eso conozca lo que su caballo debe aprender y lo que se necesita saber para entrenarlo, descubra ideas de entrenamiento divertido, fácil y seguro para quienes se inician como propietarios de caballos.
Antes de comenzar el entrenamiento del caballo, hay algunas cosas que usted necesita saber para hacerlo de una eficaz y segura. Si bien no es necesario disponer de un corral redondo si que es importante trabajar en un sitio cerrado de arena o prado.
El caballo tarda alrededor de un año en desarrollar un fuerte vinculo con su formador incluso si eres un gran experto, piensa que cada caballo tiene su personalidad  y esta la suele mostrar en las clases de aprendizaje durante su entrenamiento.
Para lograr un entrenamiento exitoso, tienes que mostrarle al caballo que eres un mejor líder que él y que tienes en cuenta lo que es mejor para él. No obstante debes saber que liderar no es lo mismo que dar órdenes. Cuando te inicies en el entrenamiento de caballos, asegúrate de dar indicaciones claras y firmes sin ser agresivo o abusivo. Tus metas como líder deben ser: 
- Ser firme, no agresivo 
- Trabajar a paso lento pero seguro para crear confianza 
- Siempre tener en cuenta la seguridad del caballo, tanto física como mental. 
- Mantenerte seguro y calmado.

No podrás entrenar apropiadamente a un caballo en nada si no eres consecuente con tu sistema de enseñanza. Al igual que con todas las criaturas, el reforzamiento funciona mejor que el castigo. Cuando el caballo logre hacer algo que le has pedido, concédele un premio en seguida. Lo típico es que esto incluya una frase de felicitación (¡buen chico! o ¡buena chica!) y una caricia en el cuello. El castigo solo se recomienda usarse cuando el caballo ignore de forma constante una indicación que tu le estés dando. El castigo debe realizarse como lo haría el líder de su manada es decir dale un fuerte empujón o pellizco en el cuello (el lo interpretaría como el mordisco que le daría su líder en caso de hacer algo que no debiera hacer) pero nunca con latigazos, debes mostrarle que tu eres el que mandas pero sin poner en riesgo su salud física. Tampoco es bueno recompensar a tu caballo con golosinas ya que esto puede provocar que con el tiempo se ponga ansioso y pueda llegar a morder. Estas golosinas las puedes guardar para cuando estas realizando alguna actividad con tu caballo fuera del entrenamiento.

  

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